El cuidado preventivo de nuestro coche es de vital importancia, no sólo para asegurarnos de que nuestro vehículo está en óptimas condiciones, sino también para evitar el desgaste prematuro del mismo y posibles averías costosas.
A continuación, vamos a repasar los puntos que consideramos más relevantes a la hora de realizar un mantenimiento preventivo de nuestro coche:
Aceite
El aceite cumple varias funciones fundamentales dentro del motor: lubricación, enfriamiento, limpieza, protección contra la corrosión y correcto sellado entre los pistones y cilindros.
La frecuencia recomendada para el cambio de aceite varía en función del tipo de aceite, del modelo y uso del coche. En general, debemos realizarlo entre los 10.000 y 15.000kms.
Debemos usar el tipo de aceite recomendado por el fabricante (5W30, 10W40, 0W30, etc.). Podemos encontrar esta información en el manual de usuario de nuestro coche o consultar a nuestro concesionario.
Filtros
Los filtros juegan un papel esencial en el cuidado preventivo de nuestro coche. Evitan que las impurezas dañen los componentes internos del motor y optimizan su rendimiento.
Existen varios tipos de filtros en nuestro coche, cada uno con una periodicidad de cambio diferente. Siempre conviene seguir las recomendaciones del fabricante, pero como norma general, podemos seguir las siguientes recomendaciones:
🚘 Filtro de aceite: Garantiza una lubricación adecuada y ayuda a reducir el desgaste. Debe cambiarse en conjunto con el aceite.
🚘 Filtro de aire: Previene que el polvo, la suciedad y otros contaminantes ingresen al motor a través de la admisión de aire. Un motor con un flujo de aire limpio funciona de una forma más eficiente, lo que se traduce en una mejor respuesta y menor consumo de combustible. Su duración varía entre los 40.000 a 50.000kms.
🚘 Filtro de combustible: Garantiza una mezcla de aire/combustible óptima, evitando problemas de motor o pérdida de rendimiento. Se recomienda cambiarlo en torno a los 60.000kms.
Neumáticos
Tenemos que asegurarnos de revisar la presión y el desgaste con regularidad. Asimismo, es importante efectuar el paralelo a nuestro coche cada vez que cambiemos las ruedas. Tomar estas medidas nos ayudará a garantizar la seguridad de nuestro vehículo, además de mejorar la eficiencia.
Frenos
Debemos revisar nuestras pastillas, discos y líquido de frenos. Además de ser un componente crucial para nuestra seguridad en la carretera, revisar estos componentes nos evita posibles gastos mayores, ya que prolongar mucho el cambio de nuestras pastillas cuando ya han llegado al final de su vida útil puede dañar nuestros discos de freno, y suponer un desembolso mayor.
Es recomendable revisar este punto en un taller, ya que puede ser muy complejo asegurar el estado de estos componentes en algunos modelos de coche.
Sistema de refrigeración
El sistema de refrigeración evita que el motor alcance temperaturas peligrosamente altas. Para su correcto funcionamiento, debemos mantener en buen estado el radiador, el termostato y las mangueras. Además, es fundamental revisar y reemplazar el líquido refrigerante en función de las recomendaciones del fabricante. Debemos revisar el nivel del refrigerante con el motor frío.
Correa de distribución
Su función principal es sincronizar la apertura y cierre de las válvulas con las fases del pistón dentro de los cilindros.
El mantenimiento adecuado de la correa de distribución es crucial para evitar daños severos y costosos en el motor. Si la correa llegase a romperse mientras el motor está en marcha, podría causar un contacto indebido entre las válvulas y los pistones, lo que puede resultar en consecuencias desastrosas.
El momento adecuado para el cambio de la correa de distribución varía según el modelo de coches. Se sustituye entre los 90.000 y los 240.000kms, deberemos consultar las pautas del fabricante.
Como hemos visto, realizar un correcto cuidado de nuestro coche no solo nos garantiza una conducción segura, sino que también nos ayuda a prolongar su vida útil y a evitar grandes desembolsos de dinero.
Estas acciones pueden ayudarnos a mantener el valor de nuestro vehículo. Algo que nos ayuda si queremos sacar rentabilidad a nuestro coche vendiéndolo, o por ejemplo, usando nuestro coche como garantía con Clidrive.
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